Cuando decidimos instalar un sistema de alarma en casa, lo hacemos para que esté siempre protegida. Que nos aporte seguridad tanto cuando estamos dentro de casa como cuando estamos fuera.
Una de las dudas más generalizadas que nos llega como profesionales en sistemas de seguridad es si una alarma inalámbrica es mejor que una cableada.
Cada uno de los dos sistemas de seguridad tiene sus características que pueden hacerlos más adecuados según qué tipo de recinto deba protegerse o las necesidades a cubrir.
Con las alarmas conectadas por cable, cualquier elemento que quieras incluir en el sistema de seguridad (sensores, cámaras…), se conectarán mediante cables tangibles. Normalmente se utiliza el cableado del teléfono fijo para las comunicaciones.
Los sistemas de seguridad inalámbricos, en cambio, se basan en la conexión mediante una red celular para comunicarse a todo el hogar. Estos sistemas aprovechan la tecnología de radiofrecuencia para crear una red en casa que pueda transmitir alarmas.
Con las cámaras inalámbricas puedes recibir tú mismo la información de tu casa.
Lo importante, tanto en un caso como en otro e independientemente de que la alarma sea de intrusión, agresión, emergencias o fuego, es estar conectado a una central receptora de alarmas. Así, te aseguras, una pronta respuesta, además de que garantizas la total y completa seguridad en tu casa.
A grandes rasgos poder decir que la instalación de las alarmas inalámbricas es más fácil y rápida. Son más discretas y puedes ensamblar nuevos sensores o sistemas en el momento que quieras.
Permite la instalación de sensores de alarmas más lejos del panel de control que en los sistemas de seguridad conectados por cable. Además, los sensores se adaptan a espacios que es difícil acceder a ellos. Son más difíciles de alterar dado que es necesario piratear el sistema. Aunque hay que estar atento a que su fuente de energía no se agote.
En caso de que en el futuro quisieran cambiar una alarma inalámbrica a otra vivienda, el transporte y la instalación es más sencillo que las opciones con cable.
Por el contrario, las alarmas inalámbricas están limitadas por el tamaño de red que pueda configurar la empresa de seguridad. Nuestros expertos valoran cada hogar para poder protegerlo con total seguridad.
En el caso de las alarmas conectadas por cable, el mantenimiento de la alarma es más sencillo. En las alarmas por cable, los sensores se alimentan de la electricidad y no es necesario estar cambiando baterías.
Los sensores de las alarmas cableadas evitan la inhibición de alarmas. Si el ladrón utiliza para su ataque un sistema de inhibición de señales, los sensores continuarán en marcha. La instalación suele requerir varias horas y a nivel estético no pasa tan desapercibida como las alarmas inalámbricas.
Entonces, ¿qué es mejor las alarmas inalámbricsa o las alarmas cableadas? La respuesta es que depende de cada caso, puesto que ambos sistemas cuentan con las máximas garantías. Lo importante es ponerse en manos de una empresa experta y experimentada.
En Segur-Mon trataremos sus necesidades de forma personalizada proponiéndole la solución más fiable y con los mejores sistemas de seguridad.
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